Se ha estado utilizando el ozono durante más de 100 años, principalmente en Europa, y primero se utilizó para la purificación del agua, el control de olores y en hospitales. Aunque el uso de sistemas de ozono ha sido frecuente en Europa y en otras zonas del mundo desde los años 1950, las piscinas suelen utilizar cloro.

Debido a su fuerte mecanismo de oxidación y desinfección, el ozono resulta muy adecuado para el tratamiento del agua de las piscinas como una alternativa a aquellos que utilizan el cloro. El ozono es un gas agresivo y suele concentrarse en la parte superior de los filtros, lo que causa daños en el revestimiento interior de los filtros.

A pesar de que algunos fabricantes de filtros defienden que el revestimiento con viniléster resiste el ozono, el revestimiento con PVC es la única solución a largo plazo. Desde hace 15 años Technol produce reactores y filtros de ozono con revestimiento interno de PVC, que es una buena solución para las instalaciones de ozono.